Hyundai ha puesto a la venta la nueva generación de su modelo urbano i10, que además de un nuevo y atractivo diseño, aumenta su tamaño, incorpora mayor equipamiento y dispone de nuevas tecnologías que elevan la calidad percibida a cotas de un segmento superior. En el convulso año recién cerrado hay un fabricante de automóviles que se ha desmarcado del resto en lo que a crecimiento de imagen de marca y calidad percibida se refiere, aupado hasta el 7º puesto en el ranking del sector y al 43 a nivel global, y esa marca no es otra que Hyundai Motor. Y no hace falta más que montarse en cualquiera de sus últimos modelos para comprobar a qué se debe esta evolución, y eso que en el viejo continente todavía no ha desembarcado el Genesis Premium, su mejor modelo.
Una de las razones que subyacen en el éxito de Hyundai es que actualmente el 90% de los vehículos que la casa coreana vende en Europa han sido fabricados dentro de las fronteras de la unión, habiendo sido muchos de ellos diseñados y desarrollados aquí también. Ese es el caso del modelo que hoy nos ocupa, la tercera generación del pequeño i10, sustituto del Atos que empezó a comercializarse en 1999. Entre todas las versiones del pequeño urbano de Hyundai han comercializado más de 870.000 unidades en la vieja Europa, así que la relevancia para la marca es muy alta.
En España el segmento urbano al que pertenece este vehículo apenas representa un 4% del mercado, y los italianos llevan con mano férrea el liderazgo de la mano del Grupo FIAT, pero con el impulso que han impreso a la ultima evolución del Hyundai i10, un coche con valor de segmento B que se comercializa a precio de segmento A, los directivos están convencidos de que las ventas van a responder muy positivamente.
El nuevo Hyundai i10 ha experimentado una renovación de su diseño exterior, en la que se ha mejorado la aerodinámica (se posiciona como líder del segmento) y se han incorporado elementos como las luces LED diurnas. Más importante aún es que ha crecido 8cm de largo para llegar a los 3,65 metros, mientras que la anchura 6,5cm mayor y la altura 5cm menor. Con ello consigue también ser el más amplio de sus rivales y el que mayor capacidad de carga del maletero tiene con 252 litros. Por cierto estrena también paleta de colores.
Pero las mejoras no se quedan ahí, pues en Hyundai también nos aseguran que es el más silencioso de sus competidores, hasta un 15% mejor en algunas mediciones, y a fe que en la toma de contacto hemos comprobado como a ralentí el coche parece estar dotado de stop&start cuando no lo lleva. Un cigüeñal desplazado 11mm del eje de los cilindros pone su avance mecánico en este sentido. El interior también se ha renovado con la incorporación de un tablero bicolor, un cuadro de instrumentos completo con ordenador de a bordo, así como con varios compartimentos y posavasos y huecos de todo tipo.
El Hyundai i10 se ofrece en el mercado español con dos versiones mecánicas diferentes, una de gasolina tricilindrica de 1.0 litros, con 66CV de potencia máxima, y otra también de gasolina pero con cuatro cilindros y 1.2 litrosy 87CV con la que la vitalidad del pequeño asiático ya es considerable. Ambos propulsores se asocian de serie con una caja manual de cinco marchas, aunque la de más potencia se podrá combinar con una automática de cuatro velocidades.
Como elementos de equipamiento, el nuevo i10 puede disponer de muchos elementos típicos de un segmento superior al suyo como son ESP, ayuda al arranque en pendiente, control de presión de los neumáticos, volante multifunción, climatizador automático, control de crucero, sensor de aparcamiento o arranque y entrada sin llave. La realidad es que desde el primer momento que nos ponemos al volante del ciudadano de Hyundai nos encontramos un coche que transmite unas sensaciones de mayor valor que lo que cuesta. La dirección tiene la asistencia justa, las suspensiones filtran con mucha comodidad sin mermar la dinámica y el silencio de rodadura es la máxima en toda circunstancia.
La nueva generación de este modelo urbano de Hyundai se comercializa en el mercado español con un precio de partida de 10.500 euros y un tope de gama de 15.550 euros entre sus 3, que en realidad son 6 con los paquetes +, acabados. A estos precios se aplica un descuento de 2.000 euros de la marca y 1.000 euros adicionales por parte del Gobierno en caso de que el cliente se acoja el Plan PIVE, así que el famoso desde comercial empieza en unos golosos 7.500 euros.