No puedo terminar esta serie sin mencionar La Targa Florio, la carrera de rally más antigua del mundo y la más famosa de Italia. Las motocicletas tenían el Tourist Trophy, en la Isla de Man, y los automóviles, la Targa Florio, en Sicilia. Su primera edición se organizó en el 1906. El recorrido se desarrolla en las carreteras de los montes Madonie, en la provincia de Palermo, en Sicilia y con ella comenzó un a tradición que a día de hoy congrega a millones de espectadores a lo largo del mundo entero.
La Targa Florio fue la última gran prueba que se disputaba en carretera abierta. Durante muchos años formó parte, junto con la Mille Miglia y las 24 Horas de Le Mans, de las legendarias pruebas del Campeonato Mundial de Resistencia. La Mille Miglia se dejó de correr a partir de la trágica edición de 1957. Entonces la Targa se convirtió en la única carrera en la que se podían ver auténticos monstruos de competición correr por carreteras normales, cruzando pueblos, subiendo a los collados y bajando laderas. Cada mes de mayo se daban cita en Sicilia los mejores y más osados pilotos con las mejores monturas.



