Uno tiene que pararse a pensar el sentido de pagar 3.000 euros más por un coche que, respecto a su hermano de gama Avant «a secas», aporta pocas cosas para un país como España. Tracción total es sinónimo de adherencia máxima, pero esta característica ya la tiene Audi en su familia de asfalto, con lo que la razón de ser del Allroad son, fundamentalmente, los países noreuropeos con medio año plagados de nieve y otras adversidades climatológicas.
De acabado y estética sumamente atractivos, el Audi A4 Allroad es, sin embargo, una opción mucho más lógica que los diversos SUVS que pueblan nuestras carreteras, pues sus cualidades dinámicas y su eficiencia prestacional, así como de consumos y emisiones, es mucho mayor. Debería, por tanto, ser el vehículo ideal para quien está pensando adquirir un Audi Q5 por cuestiones estéticas y tiene en el Allroad un todo en uno.


