El 1 de julio se va a producir un maremoto de consecuencias desconocidas en las ventas de un bien tan exclusivo como son los coches. La subida del IVA del 16% al actual al 18% promovida por el gobierno es un quebradero de cabeza para compradores y vendedores que está produciendo grandes convulsiones en el mercado, que se encuentra ahora mismo desbocado. Pero hay que mantener la calma.
No serán pocos los fabricantes que tendrán que hacer labores comerciales para contrarrestar esta sobrecarga que afecta directamente al consumidor, y no debemos olvidar que ésta es una práctica habitual desde que la competencia se hizo encarnizada entre unos y otros.
Los creativos de Ford por ejemplo han anunciado un descuento equivalente al IVA del 16% en una promoción llamada Duty Free que durará hasta el 28 de abril, un acertado movimiento de marketing que sin embargo tiene más de reclamo momentáneo que de oferta insuperable. Ford ya hace descuentos de este tipo e incluso superiores y su mayor ventaja es que es un descuento aplicable a toda la gama, no a modelos concretos. A pesar de todo, bravo por su valentía señores.

